En el México Antiguo es poco conocido que todas las esencias o Dioses eran llamados de una forma igual: Tezcatlipoca. “Espejo Humeante”. De allí derivaban el Rojo, Azul, Blanco que es Quetzalcóatl y la dualidad de los verdes: Tláloc y Chalchiuhtlicue. La utilización básica es la de las 4 aguas que describe la tradición:
Agua que no cae. Sequía. (Nuestras carencias).
Agua que cae en exceso. Inundaciones. (Nuestros Excesos)
Agua que cae con trozos de hielo. Granizo y Congelamiento. (Lo destructivo en las emociones y lo que no hemos querido cambiar).
Agua que cae en medida justa para que todo crezca. Lluvia. (Agua descendente que hace que tus proyectos crezcan.
La primera parte del curso será trabajar con estas aguas. La segunda mucho más profunda en la historia del Agua: Tetis y Océano. Agua Salada y Agua Dulce que juntas hacen la más grande fertilidad. No hay infecciones o daños que resistan el agua salada a través del reflejo y comenzaremos a trabajar el agua ascendente como la de Geisers que unen fuego y agua para crear. Además la unión en el reflejo de agua y fuego como vapor creando los chaneheques de la felicidad.
¡Por primera vez los misterios del espejo verde!.